Si por algo se caracteriza la Costa gaditana entre Tarifa y Conil de la Frontera es por atraer a un turismo alternativo y diferente del resto del litoral de nuestro país. Un turismo sensible y sostenible, que ama la naturaleza y huye de la masificación y del ladrillo. Son playas que tienen miles y miles de admiradores y defensores en todo el país, y la mejor prueba es el éxito de la Plataforma creada en facebook con cerca de 50.000 miembros en muy poco tiempo.
La pregunta es: ¿Por qué los políticos no aprovechan la oportunidad que ofrece este valor diferenciador que tiene el Palmar para desarrollar un modelo de turismo y de desarrollo diferente? ¿Por qué no estimulan su carácter propio, creando un ejemplo para toda Europa de lo que puede ser una costa sostenible a todos los niveles, en lugar de "entregarlo" al modelo del ladrillo, que ya ha demostrado su fracaso, y además tiene uniformazadas y machacadas al resto de las costas?
Que lo sepan: somos miles de personas que les estamos pidiendo que dejen de enladrillar las playas y que no les perdonaremos que destruyan lo poco que nos queda de diferente en nuestras costas y que es patrimonio de todos.
Salvar el Palmar.
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