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sábado, 29 de enero de 2011

Gasto, luego existo

El consumismo, esa fiebre que lleva a la gente a comprar cosas de las que podría prescindir porque la publicidad crea necesidades que no existen. Creen que así sus problemas serán menores, que conseguirán una vida diferente o, incluso, serán otra persona. Por eso, la gente feliz… no consume; no les hace falta.

Todo esto se resume en el libro 13,99 de Fréderic Beigbeder, un alegato contra la manipulación consumista. La historia de un publicista que escribe un libro sobre el lado oscuro de la publicidad y el consumo, para conseguir que le despidan del trabajo.

En él se dicen frases, cargadas de verdad, que a más de uno le harán reflexionar:

“Todo se compra, el amor, el arte, el planeta Tierra…”

“Vuestro deseo ya no os pertenece, os impongo el mío. Soy yo quien decide hoy lo que os gustará mañana”.

“Cuando a fuerza de ahorrar logréis comprar el coche de vuestros sueños, el que lancé en mi última campaña, yo ya habré conseguido que esté pasado de moda. Os llevo tres temporadas de ventaja y siempre me las apaño para que os sintáis frustrados”.

“El glamour es el país al que nunca se consigue llegar”.

“Os drogo con novedad y la ventaja de lo nuevo es que nunca lo es durante mucho tiempo”.

“Para crear necesidades resulta imprescindible fomentar la envidia, el dolor, la insaciabilidad…”.

“El euro ha sido inventado para que los salarios de los ricos parezca 16 veces menos indecentes. ¿Sabéis cuál es la diferencia entre los ricos y los pobres? Los pobres venden droga para comprarse unas Nike, mientras que los ricos venden Nikes para comprarse droga”.


Rosi Legido.
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9 comentarios:

  1. Buenísimo, buenísimo!!! Y pensar que hay gente que cuando está deprimida se va de compras!!! No será mejor quedar con un amigo y contarle tu problema?

    Y no olvidemos que cada vez se hacen cosas más sofisticadas, pero que deliberadamente, duran menos, para hacerte comprar otra vez algo nuevo... Pensemos en los móviles, Ipods, impresoras, ordenadores, TODO!!!

    En definitiva, consumimos lo que quieren que consumamos, hay andar con ojo!!!

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  2. Yo creo que la publicidad no crea necesidades. Si yo no soy un hombre por mucha publicidad que hagan de aftershave no lo voy a comprar. Pienso que compramos lo que necesitamos, y no somos tontos si nos ofrecen un coche que vuela no lo vamos a comprar, porque no nos lo creemos. Lo que sí crea la publicidad es el deseo, dirigir tu necesidad a una determinada marca. Sólo los ricos comprar sin necesidad, de ahí los artículos de lujo, etc.
    El consumo es necesario, hacer circular el dinero es necesario, otra cosa es que nosotros vivamos por encima de nuestras posiblidades, eso es culpa nuestra. Pero eso no lo crea nadie, somos responsables nosotros, y a todos nos gusta vivir mejor.

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  3. Yo sí creo que nos meten por los ojos cosas que no necesitamos... piensa que antes la gente podía vivir perfectamente sin móvil, por ejemplo. Ahora tenemos casi todos uno, y aunque nos funcione, mucha gente lo cambia por otro nuevo con cámara, bluetooth, mp3 y organillo... jajaajajj
    Es un ejemplo jajaja
    Claro que si se te termina la lechuga, compras otra, pero eso ya lo veo auténtica necesidad.

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  4. Esto es como todo, la pistola no dispara, es el dedo el que aprieta el gatillo, sin embargo, yo estoy más tranquilo en un pais donde no se puedan vender armas.
    Todos somos responsables de nuestros actos, pero tambien somos maleables y manipulables y de eso se ocupa el marketing.
    Echaríamos la culpa a esos mileuristas que se compraron un zulo de 30metros por 300.000euros? pues hay gente que les echa la culpa, yo se la echo al marketing, a los consejos de los políticos y banqueros que animaban a comprar, que decían que la vivienda no bajaba de precio, que un ladrillo es una inversión y que mañana costará el doble de lo que has pagado por ello. Tenemos una falsa libertad, y en ocasiones estamos asesorados por verdaderos sinvergüenzas que se erigen en paladines del mercado y animan a la gente a fracasar, a sabiendas.
    Tiene que haber consumo, pero sostenible y racional y desde luego hoy día no se nos anima a nada de eso.
    Alvarito

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  5. Entiendo que los que tienen un interés por dar salida a un determinado producto (coches, televisiones, videoconsolas, afeitadoras que te rasuran con sólo media pasada, etc, etc, etc) hagan lo posible por venderlo, y cuantos más, mejor. Y ahí tenemos que estar nosotros para dilucidar si necesito rasurarme en 1/2 o en dos pasadas o si es imprescindible comprarme el recién estrenado R-8(¡¡¡con lo que gusta!!!) cuando tengo un R-5 de hace cuatro años que todavía anda muy bien, pero que me gusta algo menos. Llegado este punto, el que pueda conseguir aquello novedoso, que aunque realmente no necesita pero le gusta, tiene la oportunidad de conseguirlo porque está en el mercado y posee los recursos para ello, pues lo comprará. Para esto cada uno tiene que ver si la vorágine consumista en la que entra le va a generar unos gastos de mantenimiento que luego no pueda afrontar. Para mí esto es responsabilidad de cada cual.
    Ahora bien, en temas como los de la vivienda, que es algo de importancia suficiente como para estar recogido en la constitución, creo que el juego este de las promociones, compras, ventas y demás debería haber tenido un mayor control por parte del gobierno y desde luego más transparencia con los ciudadanos. Como ha comentado Alvarito se ha incitado a comprar a la gente, a sabiendas de que entre todos estaban creando la famosa burbuja inmobiliaria de la que ya se llevaba hablando mucho tiempo y que con la crisis ha terminado de explotar. Aquí son responsables muchas personas que han querido hacer mucho dinero fácil, empezando por muchos ayuntamientos que han dispuesto de suelo público sin ningún control, promotores que han vendido 2ª ó 3ª calidades a precio de 1ª. Y como se vendía mucho, pues se seguía construyendo mucho, había mucho trabajo y la gente compraba R-8 y maquinillas. Y pese a haber más oferta e ir bajando la demanda, los precios seguían subiendo. Y nos hicieron creer que el ladrillo siempre sube, claro, hasta que ya no caben más ladrillos por algunos sitios y nos los tenemos que comer.
    Creo que para que realmente haya un desarrollo sostenible tienen que cambiar muchas cosas que no se quieren o no se pueden cambiar de un día para otro. Empezando por nosotros y la forma en que nos relacionamos con los demás, pues como dice el artículo: “Para crear necesidades resulta imprescindible fomentar la envidia, el dolor, la insaciabilidad…”, nosotros tenemos que intentar resistir esas sensaciones que principalmente nos meten por televisión, cuando nuestra capacidad crítica y de análisis está adormecida.

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  6. yo sí creo que la buena publicidad crea necesidades donde no las hay. la necesidad de que tengas que comprarte una crema reafirmanet o una antiarrugas o lo que sea, y la necesidad de comprar esa marca y no otra; y para crear esas necesidades antes tiene que crear inseguridades, complejos, envidias... nos manipulan mucho y no seimpre nos damos cuenta. claro, que con los productos de primera necesidad es diferente, pero hay otros artículos que sobran y la gente consume por consumir. no hay más que ver los estresantes centros comerciales en fines de semana! o esas recomendaciones contra las depresiones de: cómprese algo! la felicidad no debería costar dinero.

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  7. El objetivo de la publicidad es que tu te centres en comprar dicha marca, para ello utilizará frases, colores, famosos, etc que te incentiven. Pero sigo pensando que no es malo. Si quieres abrir una cuenta en un banco y el que hace el anuncio es un reputado presentador de TV pues te genera más confianza. Al igual que cuando vas a un supermercado, no es casualidad que determinadas marcas estén a la altura de los ojos, ni que los productos de primera necesidad estén al final del todo, todo ello se llama marketing mix.
    Pero ese marketing mix también lo hace el tendero del barrio cuando coloca los precios en color amarillo.
    Esto es una ciencia tanto para los grandes como para los pequeños, y no creo que sea tan drástico, depende más de la mentalidad de las personas. Yo no me voy a deprimir por no tener un movil de última generación (que me gustaría tenerlo, pues sí) pero habrá personas que sí, y eso no lo ha creado la publicidad sino más bien la falta de autoestima de las personas (que sería otro tema a tratar).

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  8. Está claro que la publicidad es necesaria. Partiendo de la base de que si eres empresario, para no tener que cerrar la empresa, necesitas que tus productos se den a conocer.
    Lo que a mí me escalda es el abuso de publicidad y la publicidad engañosa.
    Vale que ciertamente se aprovechan de las "carencias" de la gente, ¿pero sobre todo y ante todo? No sé, a veces me parece un poco inhumano. Dependiendo del sector al que se dirija el producto, se hace un tipo de publicidad u otra, basándose en esas "carencias". Pero intentar venderle por ejemplo, la juventud eterna a una persona, enlatada en una crema de 300 euros, no me parece normal...

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  9. no creo que se trate de que uno se deprima por no tener algo, sino de que le apetezca conseguirlo, de que por primera vez pienses en ese producto cuando antes ni se te habría ocurrido. todo está calculado al detalle sí, todo, las tiendas de moda que cambian la ropa de sitio cada pocos días para que si ves algo y pasas a los días, tengas que ver todo de nuevo; las cositas de un euro o dos que siempre están en caja y con las que así se hace caja. los colores, las luces, el tipo de letras... mil cosas, está claro. yo eso lo estudié y me parece fascinante , pero lo estudié como eso, como manipulación de la publicidad. así ha de ser un buen vendedor, saber manipular de manera casi subliminal. está claro que luego depende de la personalidad de cada uno, pero hay muchos influenciables y de ésos se aprovechan y... de los demás, un poco tb, seguro. yo me creo todo lo que cuenta este tipo en su libro, y él se dedica a eso, y será verdad cuando consiguió su propósito, que le despidieran.

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