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martes, 18 de enero de 2011

¿Qué está ocurriendo en el Sahara ocupado?

Como Sahara ocupado se conoce al territorio del Sahara Occidental, ex-colonia española, que, con el inicio el 6 de noviembre de 1975 de la Marcha Verde ordenada por el rey Hassan II y apoyada por EEUU, fue ilegalmente invadido por colonos marroquíes. El abandono del pueblo saharaui por España en tales circunstancias, fue probablemente uno de los episodios más vergonzosos de nuestra Historia. 

Muchos soldados españoles, aun obedeciendo órdenes, regresaron con graves secuelas psicológicas, a sabiendas de que dejaban a un pueblo indefenso en manos de sus vecinos invasores. 

Esta situación de ocupación ilegal ha sido sentenciada por la ONU y la Comunidad Internacional, reconociendo al pueblo saharaui el derecho a celebrar un referéndum de autodeterminación, al que se han opuesto reiteradamente Marruecos y Francia. 

Son demasiados los intereses económicos y políticos que se tendrían que pasar por alto para llegar a una solución justa. España, que desde hace décadas mantiene serios acuerdos comerciales con Marruecos, que ve en él un aliado frente a la inmigración ilegal y un parapeto contra el terrorismo, mira hacia otro lado y elude la responsabilidad histórica que la sigue uniendo a su ex-colonia.

El tiempo pasa para este pueblo que sigue condenado a la represión y al exilio en los campamentos de refugiados. Son ya 35 años de injusticia para un pueblo que, por parte de las autoridades marroquíes, sufre una continua violación de sus derechos humanos.
En territorio ocupado, los saharauis viven perseguidos, son detenidos y encarcelados, violados, torturados, a veces hasta la muerte, por no querer reconocer a un rey que no es el suyo. 

No son considerados personas, no tienen ese valor. Se les niega trabajo, vivienda, sanidad, educación. No pueden acceder a universidades de prestigio solo por ser saharauis. El objetivo es negarles las mismas oportunidades que tienen sus colonos. Están relegados no a un segundo plano, sino a la inexistencia. 

En estos últimos años, el conflicto saharaui ha cobrado fuerza de nuevo y ha vuelto a llenar páginas de prensa, minutos de televisión y sitios de Internet. La mayoría de la sociedad española está sensibilizada al respecto. Porque conocemos la verdad. Porque sabemos que un puñado de intereses no puede negar la existencia de un pueblo que clama justicia. 

El pueblo saharaui es un pueblo en constante lucha. Digno, fuerte. Consciente de sus limitaciones y de la falta de apoyo que sufren. Pero siguen manteniéndose firmes e incluso barajan tomar las armas sabiendo que se dirigen, sin ayuda de nadie, a la muerte.

En los dos últimos años, hemos vivido dos episodios trágicos que nos mostraron, de nuevo, la realidad de este pueblo. Dos capítulos de su historia que tuvieron gran  trascendencia mediática y conmocionaron a la opinión pública:

Por un lado, la huelga de hambre que comenzó el 15 de noviembre de 2009 en el aeropuerto de Lanzarote y que duró 32 días a cargo de Aminatou Haidar, activista saharaui y defensora de los Derechos Humanos, detenida y expulsada ilegalmente de El Aaiún, tras haberle sido requisado el pasaporte por las autoridades marroquíes cuando regresaba de Nueva York, de recoger el “Premio al Coraje Civil 2009” por su vida dedicada al activismo.

Y más recientemente, fuimos testigos del violento desmantelamiento del campamento “Dignidad” (Gdeim Izik) el 8 de noviembre de 2010, donde miles de saharauis, autoexiliados en este asentamiento pacífico, reclamaban derechos fundamentales como trabajo, vivienda y educación; la construcción de hospitales y colegios, y el fin del expolio por parte de Marruecos de los recursos naturales en su territorio. Todos estos derechos, básicos para nosotros, les son constantemente negados por el reino marroquí.

Pero estos no son dos casos aislados. Son solo dos muestras de lo que acontece día a día en territorio ocupado. Sin embargo, tensaron las relaciones entre España y Marruecos, porque nuestra sociedad exigió una respuesta por parte del Gobierno español. Respuesta siempre suave, condicionada por todos los intereses que entran en juego.

Actualmente, tras el desmantelamiento del campamento protesta de Gdeim Izik, la opresión hacia el pueblo saharaui por parte de las autoridades marroquíes se ha agravado todavía más. Ya han muerto un gran número de saharauis, y los que no están siendo perseguidos, son encarcelados, sin un juicio justo, y torturados. Ni siquiera a sus familias se les concede el derecho a saber dónde están, cómo se encuentran, o qué va a ser de sus seres queridos.

Mientras, Marruecos corre un tupido velo y no permite que nadie entre en lo que considera su territorio para obtener información, ni pruebas de lo que ocurre, y mucho menos que nadie salga con ellas.

Esta situación se ha extendido mucho más allá de El Aaiún, donde empezó todo, con ese campamento “Dignidad” asentado a 15 kilómetros de la ciudad. Ahora, todo saharaui que se halle en cualquier punto del Muro de la Vergüenza hacia el interior, vive escondido y aterrorizado.  

Ante los ojos de la Comunidad Internacional y de la ONU, el pueblo saharaui, insignificante frente al poderío del reino marroquí, constituye un problema sin solucionar pero que además no conviene adelantar demasiado. No se trabaja por ese referéndum prometido, se está dejando que desaparezca, poco a poco, un pueblo.

Por suerte, a pesar del bloqueo informativo por parte de Marruecos, del olvido de nuestra propia prensa, de los intentos por esconder las injusticias que vive el pueblo saharaui de las que España es responsable por no llevar a cabo una completa descolonización con todas sus garantías, y que vive bajo el yugo de una invasión despótica; existen otros medios que nos informan puntualmente de lo que sucede en el Sahara Occidental.

Algunos de ellos son: 






Y para finalizar, os dejamos un video de Sahara Thawra donde podréis ver cómo es la vida en territorio ocupado. 


Raquel Ruiz.

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2 comentarios:

  1. Como decia García Márquez: La muerte no llega con la vejez, sino con el olvido.
    Es lo que quiere Marruecos que se olvide y así desaparece este pueblo.
    A Marruecos está claro que no le interesa la independecia del sáhara pero ¿Porque no le interesa también a Europa? En un enfrentamiento Europa-Marruecos ganaría Europa,"simplemente" bloqueando la entrada de pescado y cítricos. Pero esta claro que es un tema que no le preocupa.
    ¿Hassan II se hubiera atrevido a invadirlo si el que hubiera estado agonizando fuese un "Francisco Franco" francés o alemán?

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  2. No se va a celebrar el referéndum hasta dentro de muchos años. El Polisario quiere que en el censo aparezca la gente nacida hasta el 75, cuando entraron los colonos, para que solo voten saharauis. ¿Cuántos años crees que tienen ya los saharauis "de verdad"? Solo les hace falta esperar un poco más para que desaparezcan. La impunidad de Marruecos es sangrante.
    Nadie va a ponerse en su contra, siempre ha sido el niño bonito de EEUU y ahora también de Europa.
    Pero ahí seguiremos nosotros apoyando al pueblo saharaui. Lo único que me anima es que ellos mismos dicen que su abandono no es culpa del pueblo español, que saben que estamos de su parte, sino de nuestro gobierno, ese que no nos representa. Y da igual el gobierno que sea, eh? ni unos ni otros. Ni el que tenemos ni el que podrá venir.
    El poder hace olvidar tantas cosas...

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